Ubisoft ha activado una vez más el ánimo, esta vez transportando a los jugadores al período Sengoku de Japón en Assassin's Creed Shadows. El juego presenta figuras históricas de 1579, como Fujibayashi Nagato, Akechi Mitsuhide y el Samurai Yasuke africano, que sirvió a Oda Nobunaga. Al igual que con las entradas anteriores de la serie, estos personajes están intrincadamente entretejidos en una narración que combina los hechos con ficción, explorando temas de venganza, traición y asesinato. Si bien el juego incluye un guiño humorístico a la reunión de XP y las armas de nivel de oro, es importante recordar que Assassin's Creed se basa en la ficción histórica, creando una historia de conspiración de ciencia ficción sobre una sociedad secreta con el objetivo de controlar el mundo utilizando los poderes místicos de una civilización prehumana.
Aunque los entornos del mundo abierto de Ubisoft son meticulosamente investigados e inspirados históricamente, no se pretenden como lecciones de historia. Los desarrolladores alteran creativamente hechos históricos para mejorar la narración. Aquí hay diez instancias notables en las que Assassin's Creed ha reescrito la historia juguetona:
The Assassins vs Templars War
El conflicto central entre la Orden de Assassins y los Caballeros Templarios es completamente ficticio. Históricamente, no hay evidencia de tal guerra; Ambos grupos existieron durante las cruzadas, pero sus interacciones fueron mínimas y no impulsadas ideológicamente. La serie Assassin's Creed usa creativamente este telón de fondo para tejer una narrativa atractiva, aunque está muy lejos de la realidad histórica.
Los Borgias y su Papa Superpoderado
En Assassin's Creed 2 y Brotherhood, la familia Borgia, dirigida por el Papa Alexander VI (Rodrigo Borgia), es retratada como el títere de la Orden Templaria. Si bien los Borgias fueron realmente controvertidos, la representación del juego de ellos como villanos con aspiraciones sobrenaturales es una desviación significativa de la historia. La dramática confrontación entre Ezio y el Papa bajo el Vaticano es un momento emocionante del juego, pero puramente ficticio.
Maquiavelo, enemigo de los Borgias
Niccolò Machiavelli, retratado como el aliado de Ezio y el líder de la Oficina de Asesina italiana, es una libertad creativa tomada por Ubisoft. En realidad, las filosofías políticas de Maquiavelo y su relación con los Borgias, a quienes respetaba, no se alinean con la narrativa del juego. Su representación como asesino que lucha contra la autoridad contradice su postura histórica sobre la fuerte gobernanza.
El increíble Leonardo da Vinci y su máquina voladora
Assassin's Creed 2 muestra un fuerte vínculo entre Ezio y Leonardo da Vinci, capturando el carisma y el ingenio del Polymath. Sin embargo, el juego altera la línea de tiempo de viaje de Da Vinci y da vida a sus inventos conceptuales, como una máquina voladora. Si bien estos diseños fueron visionarios, no hay evidencia histórica de que alguna vez fueron construidos o usados.
La sangrienta fiesta de té de Boston
La fiesta del té de Boston en Assassin's Creed 3 transforma una protesta pacífica en una confrontación violenta. Históricamente, nadie murió durante el evento, pero en el juego, el protagonista Connor y sus aliados participan en una escaramuza mortal con los guardias británicos. Además, el juego sugiere que Samuel Adams meta el evento, una afirmación de que los registros históricos no apoyan de manera concluyente.
El mohawk solitario
Connor, el protagonista de Assassin's Creed 3, es un mohawk que lucha junto a los Patriots, lo que contradice alianzas históricas. La tribu Mohawk fue aliada con los británicos durante la Guerra Revolucionaria. Si bien existen casos raros como Louis Cook, la historia de Connor representa un escenario "qué pasaría si" que agrega profundidad a la narrativa del juego.
La revolución templaria
La representación de Assassin's Creed Unity de la Revolución Francesa como conspiración templaria es una desviación significativa de la historia. El juego sugiere que la revolución fue diseñada por los templarios, incluida una crisis alimentaria fabricada, mientras que en realidad, fue un evento complejo impulsado por desastres naturales y descontento generalizado.
El controvertido asesinato del rey Louis 16
La ejecución del rey Louis 16 en Assassin's Creed Unity se representa como un voto cercano influenciado por un templario, mientras que históricamente, fue una clara decisión mayoritaria. El juego también minimiza el intento del rey de huir de Francia y las causas más amplias de la revolución, presentando una visión más suave de la aristocracia francesa.
Jack el asesino
Assassin's Creed Syndicate Reimagines Jack the Ripper como un lógico Assassin que busca el control sobre la Hermandad de Londres. Este giro narrativo agrega una capa dramática a la figura histórica, que permanece no identificada y cuyos crímenes nunca estuvieron vinculados a tales conspiraciones.
El asesinato del tirano Julio César
Assassin's Creed Origins reinventa el asesinato de Julius César como una batalla contra un líder proto-Templar. El juego simplifica el complejo panorama político de la época y enmarca la muerte de César como una victoria, ignorando las consecuencias históricas que condujeron a la caída de la República Romana y al ascenso del Imperio.
La serie Assassin's Creed hace todo lo posible para crear mundos históricos inmersivos, pero estos mundos a menudo están adornados para fines de narración de historias. Como ficción histórica, los juegos combinan elementos fácticos con libertades creativas, ofreciendo a los jugadores una experiencia emocionante en lugar de un documental histórico. ¿Cuáles son sus ejemplos favoritos de Assassin's Creed doblando verdades históricas? Compártelos en los comentarios.